Quizás estaréis pensando en la obviedad del título. Si alguien hereda mucho dinero, es probable que su comportamiento financiero sea diferente de otro que no reciba ningún legado dinerario. El punto clave es que no me refiero a una herencia económica. Me quiero centrar en determinadas maneras de obrar que hemos aprendido de pequeños en el entorno más cercano. Y este tipo de herencia familiar nos influye (también) a nivel financiero. Intentaré ayudar a tomar conciencia de ello.
Como en otras ocasiones, hay un libro inspirador para todo esto. Se trata de «Psicogenealogia en torno al dinero y al éxito», de Marie-Noëlle Maston-Lerat. La psicogenealogia estudia como nuestro destino está, en parte, determinado por la historia y la psicología de las generaciones que nos preceden.
Intentaré alejarme de aspectos que sospecho que pueden escandalizar a las mentalidades más racionales. Así, prescindiré de determinados análisis a partir de repeticiones o coincidencias en fechas dentro de los árboles genealógicos, por poner un ejemplo. Por el contrario, me focalizaré en reflexiones sobre la herencia familiar que considero que podemos asociar a nuestro comportamiento financiero. Corresponderá a cada uno determinar hasta qué punto el contenido que sigue encaja en la propia vivencia.
El comportamiento financiero de hormigas y cigarras
¿Recordáis la famosa fábula de la hormiga y la cigarra? Suele suceder que las hormigas engendran hormiguitas. Y, por supuesto, las cigarras, crías de esta especie. Reproducir un determinado comportamiento financiero es habitual con respecto al dinero.
También puede ocurrir que las pequeñas hormigas o cigarras se rebelen. En este caso, en vez de seguir la tradición económica familiar, el comportamiento financiero sería precisamente el contrario. Por ejemplo, las penurias económicas vividas durante la infancia podrían explicar una tendencia a quemar dinero en todo tipo de gastos durante la edad adulta. O, a la inversa, un exceso de gasto de los padres podría provocar una desmesurada tendencia al ahorro por parte de los hijos.
La educación y el comportamiento financiero
Educar a alguien tiene como objetivo conseguir la autonomía de esta persona. En términos económicos, esto se podría concretar en la independencia financiera de los hijos. En esta línea, hay varios aspectos que podemos mencionar.
A veces, los padres responden sin límites las demandas de los hijos. Incluso pueden llegar a anticiparse. En este caso, lamentablemente no les estarán preparando para situaciones donde obtener lo que se desea ya no sea tan sencillo.
En otras ocasiones, los regalos sustituyen la presencia de los padres. O pretenden ser una expresión de amor. El aprendizaje que se puede derivar por parte de los hijos es una necesidad de obsequiar para demostrar la estima.
Una muy buena recomendación es dotar a los adolescentes de una cierta autonomía financiera. Esto puede pasar por fomentar que hagan trabajos para ganarse los primeros ingresos.
Me referiré para terminar a la posible herencia relativa a padres divorciados. Estos pueden provocar una dependencia afectiva y financiera si ponen todo su foco en que a sus hijos no les falte de nada. Más tarde a estos últimos les costará mucho cortar el cordón umbilical.
Preguntas para la reflexión
La obra que mencionaba unas líneas más arriba formula multitud preguntas que interpelan. Haré una recopilación de las que me han parecido más adecuadas para reflexionar.
- ¿En qué condiciones socioeconómicas viviste durante la gestación y primer año de vida?
- ¿Tenías un contexto familiar seguro y cariñoso?
- ¿Qué interés demostraban tus padres por tu futuro a nivel profesional? ¿Escogiste tu profesión, o te impulsaron a hacerlo?
- ¿Cuándo recuerdas haber oído hablar de dinero por primera vez, y en qué términos?
- ¿Tenías miedo a las carencias? ¿O el dinero no era nunca un problema?
- ¿Te lo compraban todo? ¿O más bien al contrario?
- ¿Te tuviste que pagar los estudios?
- ¿Te ayudaron tus padres a planificar a largo plazo?
Transportarnos con estas preguntas, o cualquier otra similar, a la infancia vivida nos puede aportar luz sobre nuestro comportamiento financiero actual. Y, por supuesto, nos puede ayudar a modificarlo, en su caso.
Acompañamiento en cambios de comportamiento financiero
Completamos todo el contenido anterior con algunos links. En primer lugar, me remito a otras entradas de este mismo blog relativas a creencias y educación de los hijos. También puede ayudaros un poco de bibliografía y un interesante artículo que habla sobre psicogenealogia.
Para acabar, ponemos a tu disposición nuestro servicio de Coaching en economía doméstica para ayudarte a entender mejor el origen de tu comportamiento financiero. Este es un buen primer paso para evolucionar en este aspecto, si es que deseas hacerlo.