Ya llevamos unos días donde las obligaciones fiscales, como cada año, vuelven a ser protagonistas. Muchos de los clientes con los que hablo por primera vez consideran las declaraciones de impuestos como un trámite que hay que pasar a la fuerza. Y es cierto que estamos obligados a hacerlas. Sin embargo, también nos brindan un fantástico momento para detenernos. Las obligaciones fiscales nos dan la oportunidad de analizar qué pasa con nuestros ingresos o negocio. Y no siempre la aprovechamos.
Efectivamente, hay muchos particulares o profesionales que preparan (o se hacen preparar) las declaraciones con un único fin. El objetivo es saber qué toca a liquidar (o cobrar, si hay suerte). ¿Estaríais contentos si os tocara pagar el doble de impuestos que el año pasado? Estoy seguro de que para la mayoría la respuesta inmediata es «no». Posiblemente si os digo que a mí me encantaría me miraréis como una persona bien rara. Y no descarto que lo sea. Pero no debería ser calificado como tal por este motivo. Veamos el porqué.
Pagar más por obligaciones fiscales debería alegrarnos
Pensémoslo bien. Existe la posibilidad de que el gobierno de turno haya enloquecido y decida incrementar desmesuradamente los tipos impositivos. Pero, en condiciones normales, si alguien paga mucho más es que sus ganancias se han incrementado. Por otra parte, ingresos superiores deberían traducirse en una mayor capacidad de ahorro o inversión. Y también en más facilidad para liquidar los impuestos cuando toque. En caso de que no sea así es que hay algo a revisar. Si se tienen dificultades para pagar a Hacienda pese a ganar más, ¿dónde está ese dinero ingresado adicionalmente?
El contenido del anterior párrafo es aplicable a casi cualquier tipo de declaración. Como particulares, con las obligaciones fiscales una vez al año tenemos una excelente posibilidad de pasar cuentas con nosotros mismos vía IRPF. Como autónomo o empresario esta oportunidad se convierte al menos en trimestral. Se concreta en forma de pagos a cuenta de IRPF, IVA o declaración de retenciones, por ejemplo.
En un formulario de Hacienda relleno hay mucha información
¿Os ha pasado alguna vez que el banco os solicita las últimas declaraciones presentadas a Hacienda? Si sois autónomos o empresarios y deseáis solicitar algo que vuestra entidad financiera, seguro que sí. Y si sois particulares, es probable que también. Las declaraciones oficiales son auténticas fotos de la situación financiera. Contienen mucha información útil. Y más cuando no se está obligado a llevar una contabilidad donde hacer consultas similares, como ocurre con muchos autónomos. En estas condiciones, seguramente las declaraciones que se presentan aportan datos tan interesantes como lo que se ha vendido o comprado. Y qué beneficio ha dejado todo ello.
Si damos un paso más, cualquier declaración es susceptible de ser comparada con la del trimestre anterior. O la del año precedente. De este modo, se puede hacer seguimiento de la evolución de las principales magnitudes económicas de un particular o negocio, y sacar conclusiones.
El saludable hábito de dedicar un tiempo a las obligaciones fiscales
Tal y como hemos visto, dedicar un espacio a revisar las diferentes declaraciones nos pone ante el espejo para analizar los resultados económicos de nuestra actividad. Especialmente cuando como trabajador por cuenta ajena o autónomo no tenemos ninguna otra fuente de información.
Por desgracia, existe un grueso de gente que no se ve capaz de rellenar por sí misma los diferentes formularios que derivan de las diversas obligaciones fiscales. No son documentos sencillos si no se está habituado a tratar con ellos. Y tenemos muchas y muy variadas (ver enlace). A pesar de ello, animo a todos a analizarlos de la mano del gestor que se haya ocupado de su confección. También puede ser un trabajo para el director financiero de bolsillo al que hacía referencia en un post hace semanas.
Siempre es altamente aconsejable el seguimiento de la evolución de toda economía. Si, como ocurre a menudo en las familias o pequeñas empresas, las declaraciones son la única herramienta para hacerlo, vale la pena dedicar un rato a entender qué hay detrás de cada una de las cifras.
Saca provecho de tus obligaciones fiscales
Ponemos a tu disposición nuestro servicio de Asesoramiento financiero para autónomos para ayudarte a entender mejor el funcionamiento de tu negocio y sacar provecho de toda la información de la que dispones para su análisis.