Los que seguís este blog desde hace tiempo ya sabéis que nos encanta colaborar con medios de comunicación. Aprovechamos cualquier oportunidad para difundir contenidos que ayuden a la gente a organizarse a nivel económico. En concreto, hace unas semanas llamaba la puerta de acOnseguir la revista Clara. La periodista Araceli Herrero quería preparar un artículo sobre cómo sería esta crisis económica en comparación a la de 2008. A continuación encontraréis algunas pinceladas del resultado. Incorpora también recomendaciones de otros expertos.
Esta crisis económica es diferente a otras anteriores
Hay casi completa unanimidad sobre que esta situación nunca la habíamos vivido. Yo mismo lo comentaba en el blog hace algunos días. Durante semanas hemos tenido el grueso de los comercios cerrados. La crisis ha sido sanitaria, pero las consecuencias serán económicas.
Además, ya estamos viendo como la vuelta a la «normalidad» será lenta. Hasta que no haya una vacuna, costará que vivamos y consumamos como antes. Y, sin entrar en si el modelo anterior de consumo era o no sostenible, esto ralentizará la recuperación. Todo ello tendrá bastantes damnificados, conviene estar atentos.
Es tiempo de ser proactivos (y no reactivos)
Es posible que hayáis sufrido un ERTO (o peor aún, un ERO). O sospecháis que la empresa donde trabajáis quizás tendrá problemas. O sois autónomos con un fuerte descenso de ingresos. Conviene prepararnos para el peor de los escenarios. Esto ayudará, llegado el caso, que no sean el miedo o las emociones las que decidan. Más bien deberíamos guiarnos por reflexiones desde un cabeza fría. Propongo que nos hagamos preguntas del tipo:
- ¿Cuáles son las salidas de dinero mínimas a seguir atendiendo?
- ¿De qué recursos puedo vivir en caso de necesidad durante la crisis económica?
- ¿Qué habilidades mías puedo explotar, qué puedo ofrecer que interese a la sociedad?
- ¿Como se mueve (entra y sale) el dinero en mi casa?
- ¿Qué podría recortar si es menester? ¿Cuáles son aquellos gastos que ni siquiera sé por qué los tengo? (por ejemplo, coberturas duplicadas de pólizas, gigas de móvil que nunca llego a consumir, potencias eléctricas excesivas, etc.)
- ¿A qué ayudas tendría derecho si acabara en una situación económica muy precaria?
El presupuesto es especialmente útil en una crisis económica
Resulta reconfortante observar que en el artículo de Clara también aparece la necesidad de trabajar con un presupuesto. Y más si quien lo afirma es una miembro del Plan de Educación Financiera que promueven la CNMV y el Banco de España.
En línea con lo que yo mismo he escrito multitud de veces, es recomendable:
- Identificar a qué destinamos los ingresos. La finalidad es poder efectuar ajustes para conseguir objetivos de ahorro a largo plazo. Una serie de pequeñas recortes pueden llevarnos a recoger un buen dinero.
- Adoptar el hábito de controlar el presupuesto regularmente y ajustarlo, en su caso.
Oportunidades que puede ofrecer la crisis económica
A menudo se hace referencia a que en el doble símbolo chino que define «crisis» hay también uno que equivale a «oportunidad». Quien la esté sufriendo en primera persona costará que lo vea. Pero las posibilidades positivas que aporta todo cambio están ahí. La crisis económica puede ofrecernos obtener algún provecho. Y más si tenemos la suerte de que no nos ha afectado directamente. Por ejemplo:
- Se empieza a detectar una importante caída de los precios inmobiliarios. Tanto a nivel de compra como de alquiler.
- La bolsa ha experimentado una fuerte corrección que ha abaratado precios.
- La crisis económica nos aporta aprendizajes que pueden servir para estar más preparados para cuando venga otra.
- Hay dinero disponible en forma de préstamos (sólo recomendables si podemos sacar un rendimiento más alto que los que nos cobren de intereses).
Quizás esta crisis económica nos empuja hacia un consumo sostenible
De nuevo, propongo que nos hagamos algunas preguntas:
- ¿A qué empresas o autónomos parar el dinero que sale de mi bolsillo?
- ¿Ayudo con mis compras a personas de mi alrededor (consumo de proximidad)?
- ¿Compro a compañías que pagan los impuestos y crean empleo en mi país?
- ¿Se benefician empresas con un enfoque productivo sostenible?
¿Y si todo esto acaba por ser útil?
Recuerda que el servicio de Coaching en economía doméstica te puede acompañar en la revisión de tus finanzas personales o familiares. En momentos como éstos es cuando es más recomendable profundizar en cómo destinamos los recursos de los que disponemos. Dar la vuelta a la crisis económica también está en nuestras manos.
Como es habitual acabo con algún link. El primero te llevará a la revista Clara. Espero que pronto pueda disponer del artículo en formato web. Y el segundo te permitirá repasar la entrada de hace unos días sobre resiliencia en estos tiempos de crisis económica.